MAXI palmera de chocolate

Los que me conocen saben que odio los sitios en los que la calidad de la comida se mide por el tamaño del plato. Eso no quiere decir que no me guste un buen cachopo...pero no necesito que tenga un tamaño mamut para que me encante. Para aquellos no instruidos en la materia, deciros que un cachopo es un plato típico de Asturias, similar (salvando las distancias)  a un librito o un sanjacobo, elaborado con carne de ternera, y relleno de jamón serrano, queso, etc. Y por alguna razón, existe la maldita manía en Asturias de servir cachopos del tamaño de Segovia...que sobresalgan bien del plato y que sean físicamente imposibles de terminárselos por un mínimo de dos comensales. De hecho, es habitual compartir un cachopo incluso entre la mesa completa...como si fuera un menú degustación de los mejores restaurantes.

Pero como toda regla tiene su excepción, hay algo que hay que probar al menos alguna vez en la vida en su versión MAXI. Justo en la frontera entre Asturias y Cantabria, hay un pueblo famoso por un dulce de hojaldre: las corbatas de Unquera. Es imposible pasar por esta carretera y no parar a tomarse un café. Y resulta que algunos de los obradores que las hacen se han hecho famosos por una versión gigante de la clásica palmera de hojaldre recubierta de chocolate. Esta vez la disfrutamos en formato desayuno, camino de Castilla...aquí está la prueba gráfica.

Seguramente no es el mejor hojaldre de nuestras vidas, pero merece la pena probarla, compartirla y disfrutarla. Las auténticas las encontraréis en Royal III: La casa azul, en Los Tanagos, en la carretera que va de Unquera a San Vicente de la Barquera.